Effie Gray

«Todo sucede a trompicones y precipitadamente en los primeros minutos de película, insistiendo machaconamente en la condición de ‘secuestrada’ y ‘oprimida’ de Gray, quien por supuesto carece de pecado original»

Formato: Película
Año: 2014
Director: Richard Laxton
Reparto: Dakota Fanning, Emma Thompson, Claudia Cardinale, Russell Tovey, Julie Walters, Robbie Coltrane, Tom Sturridge, Derek Jacobi, David Suchet, James Fox.
País: Reino Unido
Duración: 108 min
Género: Drama romántico
Época histórica: Siglo XIX. 1850s
Puntuación: ★★☆☆☆ (Regular)

 

 

Sinopsis
Inglaterra: era victoriana, con 19 años Eufemia «Effie» Gray se ha casado con el historiador de arte y crítico John Ruskin, pero se niega a consumar su matrimonio. Solitaria y frustrada Effie se ve atraída por el pintor pre-Rafaelita John Everett Millais, y encuentra un amiga y defensora en Lady Elizabeth Eastlake. Después de cinco años atrapados en un matrimonio sin amor, Effie desafiará las reglas de la sociedad victoriana.   [Filmaffinity]

Fuente: Rakuten TV

Análisis

Película acerca de los primeros años de matrimonio de Effie Gray con John Ruskin. Por tanto, no abarca su posterior matrimonio con John Everett Millais ni su acción social y cultural en Londres en la segunda mitad del siglo XIX. La convivencia entre Gray y Ruskin, así como su separación, ya había sido ampliamente dramatizada en obras literarias, óperas, dramas teatrales y películas. En esta ocasión, esta adaptación no se salda con éxito. Laxton presenta una película tramposa, tendenciosa y cuyo atractivo y complejidad se difumina en un vulgar mensaje único.

Fuente: Filmuforia

Desde el arranque, el director obliga al espectador (casi a golpe de pistola) a simpatizar con la protagonista, pero no con Effie Gray, sino con la causa de Gray, porque hay una gran diferencia entre una y otra cosa. Empatizar con Effie resulta sencillo y natural, pero para simpatizar con su causa hay que permitir que sus actos, las causas y los acontecimientos convenzan al espectador para ello, y Laxton no concede un solo minuto al intento por convencer. Todo sucede a trompicones y precipitadamente en los primeros minutos de película, insistiendo machaconamente en la condición de ‘secuestrada’ y ‘oprimida’ de Gray, quien por supuesto carece de pecado original. No hay esfuerzo alguno en procurar que empaticemos con Ruskin, en comprender por qué los padres de este actúan como actúan o en humanizarle mínimamente.

La gran pregunta es por qué Gray espera hora y media de película en tomar la decisión de separarse, cuando su marido carece de humanidad (según describe la película) dese el primer minuto del relato. Hay que concederle a la película, al menos, la delicadeza con la que presenta el enamoramiento entre Gray y Everett Millais, huyendo de un arranque pasional a la primera de cambio, pues se toma sus tiempos para que se traten. Por otra parte, son interesantes los debates artísticos acerca de la belleza y la finalidad del arte, así como la descripción del funcionamiento de la Academia y la relación entre los grupos de artistas. Es una pena que no se haya explotado más esta vertiente, pues la cámara recoge de modo omnipresente la relación entre Gray y Ruskin.

Fuente: Amazon

Queda así un relato fallido, cegado por la ideología barata en la defensa de una causa que no necesitaba ser defendida, pues bastaba con que las acciones de los personajes hablasen por sí solas. Los secundarios y el ambiente artístico londinense están desaprovechados, aunque es loable la calidad visual y el diseño de sus planos.


Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s